Wednesday, October 18, 2006

Las bendiciones del Señor

Humanamente nos faltan fuerzas para enfrentar ciertas circunstancias, que traen consigo dolor profundo y sufrimiento.

Ahora hermanos, gracias al amor y la misericordia de Dios, en él podemos encontrar consuelo a esas dificultades que parecen más grandes que nosotros.

Comamos de ésta palabra de alivio, palabras de vida eterna, palabras verdaderas:

Romanos 8:

Más que vencedores

28Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados. 29Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos. 30Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.
31¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? 32El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas? 33¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica. 34¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros. 35¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada? 36Como está escrito:
Por causa de ti somos muertos todo el tiempo;
Somos contados como ovejas de matadero.
37Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. 38Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, 39ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.

Ciertamente, muchas veces cometemos la imprudencia de rogarle hasta a nuestros enemigos, que nos ayuden y se compadezcan de nosotros, olvidándonos que el poderoso de Israel tiene cuidado de nosotros, y que para él nada es difícil.

De manera que debemos confiar plenamente, podemos hacerlo, porque aquel que nos amo, también es quien puede ayudarnos a salir adelante, en cualquier tribulación, a superar cualquier barrera, solo sometamos nuestros pensamientos a la obediencia en Dios, orando fervientemente con toda acción de gracias.

Hermanos, rindamos nuestra vida a Cristo, el único que nos ama incondicionalmente, que no estimo su vida, para ofrendarla en pago para que nuestros pecados fueran perdonados por Dios.

Les amo en Cristo, y espero que esta palabra sea para ustedes de tanto gozo como lo ha sido para mí.

No comments: