Friday, June 22, 2007

¿En quien creemos?

Amados hermanitos, hoy quiero invitarles a constatar de lo que hablamos, es decir, así como hacían los judíos en Bereas, Hechos 17: 11Y éstos eran más nobles que los que estaban en Tesalónica, pues recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así.

Nuestro espíritu se alienta y fortalece, al ver que creemos en un Dios Santo, que no miente, y ha prometido cuidar de sus siervos y librarlos de toda opresión.

Las profecías del Señor son irrefutables, debido a su naturaleza, prueba de ello para comenzar, es que si consultamos un mapa actual del Oriente Medio, ¿encontramos los nombres Ammón, Asiria, Babilonia, Edom o Moab? De Nínive, la gran ciudad esplendorosa del siglo IX antes de nuestra era, no quedan mas que ruinas, porque Dios profetizo su destrucción mediante Nahum en los capítulos 2 y 3: 13Heme aquí contra ti, dice Jehová de los ejércitos. Encenderé y reduciré a humo tus carros, y espada devorará tus leoncillos; y cortaré de la tierra tu robo, y nunca más se oirá la voz de tus mensajeros.
3
1¡Ay de ti, ciudad sanguinaria, toda llena de mentira y de rapiña, sin apartarte del pillaje! 2Chasquido de látigo, y fragor de ruedas, caballo atropellador, y carro que salta; 3jinete enhiesto, y resplandor de espada, y resplandor de lanza; y multitud de muertos, y multitud de cadáveres; cadáveres sin fin, y en sus cadáveres tropezarán, 4a causa de la multitud de las fornicaciones de la ramera de hermosa gracia, maestra en hechizos, que seduce a las naciones con sus fornicaciones, y a los pueblos con sus hechizos.

Los profetas anunciaron la caída de todas estas naciones (Amós 2:1-3; Abdías 1, 8; Nahúm 3:18; Sofonías 2:8-11; Zacarías 2:7-9) que fueron notables en su época, pero su esplendor y poder, no pudieron detener la mano de Jehová, porque su mano esta extendida y nada puede detener los cambios que el hará, preciosa palabra que sacia mi alma hermanos, Is 14:27.

Grandioso es el Dios y Padre, que adoramos y alabamos, porque no miente, cumple sus promesas, el grandioso plan de salvación también fue anunciado por sus profetas y vemos su cumplimiento en el nuevo testamento, nuestro MESIAS Jn 1:14:

HECHO
PROFECIA
CUMPLIMIENTO

Nace en Belén
Miqueas 5:2
Lc 2:4-11; Jn 7:42

Dios lo llama de su refugio en Egipto
Oseas 11:1
Mt 2:14-15

Entra en Jerusalén montando un asno
Zacarías 9:9
Mt 21:1-9
Jn 12:12-15

Lo traicionan por 30 piezas de plata
Zacarías 11:12
Mt 26:15,
27:3-10

El pastor es herido y las ovejas esparcidas
Zacarías 13:7
Mt 26:31, 56

Lo traspasan mientras esta en el madero
Zacarías 12:10
Mt 27:49;
Jn 19:34, 37

Resucita tras estar sepultado parte de tres días
Jonás 1:17, 2:10
Mt 12:39-40; 16:21;
1 Corintios 15:3-8

Siendo sabio amado, descubre el tesoro de promesas que en la Biblia Dios nos hereda, no puedes perderte la grandiosa realidad que por ahora tiene libre acceso, guárdala en tu corazón, ejecútala, porque vivimos días malos y vendrán peores que estos… ¡pero tu tendrás seguridad!, en el nombre que es sobre todo nombre, en el nombre de Jesús.

Ha prometido a quienes creemos en el pago por nuestros pecados en la Cruz del Calvario, vida eterna, a través de Cristo Jesús, nuestro redentor, bíblica e históricamente es comprobable la veracidad de su palabra, sus promesas son verdaderas y eternas, no cambia, su palabra encierra miles de promesas que podemos alcanzar mediante la fe, sanidad, seguridad, pronto auxilio en las tribulaciones. Su maravillosa voz ha dicho, Is 1: 18Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.

Amado, tu que aun no disfrutas de su consuelo y sus promesas, si le confiesas con tu boca, que es el hijo de Dios, que murió y resucito al tercer día, y le pides que te perdone y limpie, te aceptara, solo necesitas hacerlo de corazón, creyendo y luego veras verdadero esplendor en tu vida, restauración, y tu alma estará saciada de todo aquello que nada del mundo puede proveerte. Jehová Jireh ha prometido proveernos, y lo cumple. De manera que estarás inscrito en el libro de la vida, y en el juicio habrá alguien que ya te haya justificado y haya pagado tu deuda de pecado, podrás entrar en el gozo de la vida eterna y ser salvo del lago eterno de fuego, en sus brazos estarás seguro. Veras la gloria de Dios, y vivirás sin llanto ni dolor por siempre.

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